GARCÍA DE ALBIZU USARBARRENA, BALBINO

Reflejamos dos testimonios aportados respectivamente por sendos familiares de Balbino García de Albizu Usarbarrena. En estos casos por el carácter delicado de la reconstrucción colectiva de la memoria, respetamos la redacción de cada testimonio salvo las imprecisiones de índole cronológico o de la sintaxis de los nombres. Ordenamos los testimonios de más reciente a más antiguo.

 


Testimonio 3. Nuevas conclusiones sobre la sima del Raso aportadas por su nieto Balbino García de Albizu (Donostia). Balbino trabaja muy activamente en un libro dedicado a la represión tras el Golpe de Estado de 1936 en las Amescoas.Y desarrolla el programa aprobado por los ayuntamientos amescoanos para el “recuerdo, reconocimiento y reparación moral” de las víctimas de la represión local, y colabora, aportando la investigación documental, con la Sociedad de Ciencias Aranzadi, que lleva a cabo la investigación forense, dirigida por Francisco Etxeberria y Lourdes Herrasti. Esta estrecha colaboración está descubriendo aspectos verdaderamente novedosos de lo ocurrido en la sima y contribuyendo a la identificación de los cadáveres anónimos que fueron exhumados.


 
Tras las oportunas pruebas de ADN e investigación forense llevadas a cabo por Francisco Etxeberria y Lourdes Herrasti, de la Sociedad de Ciencias Aranzadi, en la Facultad de Medicina de San Sebastián, se han identificado los restos de Balbino García de Albizu.

 

Tras la comunicación hecha a su nieto, Balbino García de Albizu, cuya muestra de ADN sirvió de referencia, nos remite la siguiente nota, que gustosos añadimos a la biografía disponible de Balbino García de Albizu Usarbarrena:

Recibió dos disparos. Uno de atrás hacia delante, en el lado izquierdo del cráneo. Otro de delante hacia atrás, que entró entre los ojos y no hay orificio de salida porque el proyectil se quedó alojado en el cráneo.

Mi interpretación es que en el primer disparo, estaba de espaldas, y le dispararon en la nuca. Y al caer al suelo, quedó boca arriba, quizá se movía aún y le volvieron a disparar entre los ojos para rematarlo.

Los proyectiles fueron disparados con arma corta y a escasa distancia. El calibre de 9 mm corto. Tras ello, su cadáver fue empujado a la sima.

Vestía un blusón negro que era habitual en él, y que sus paisanos describían como “blusón de tratante de ganado”, y parece probable que llevase un pañuelo al cuello. Acostumbraba a llevar un reloj de bolsillo, con el que entró en la cárcel, pero que luego no apareció.

La investigación forense ha constatado que en la sima convivieron cuatro perros que se alimentaron de los cadáveres y bebieron agua de los goteos de las paredes de la sima. Cuando no tuvieron más que comer, se mataron entre ellos y se devoraron.

Como los perros, y menos cuatro a la vez, no se caen a las simas, y si eso hubiera ocurrido, hay 20 metros desde la boca de la sima hasta la parte más baja, hubieran sufrido heridas graves o se hubieran matado. No cabe otra deducción que la de que fueron bajados a la sima en sacos de arpillera o descolgados con cuerdas, para que devoraran los cadáveres. Y eso hicieron. Los perros no podían salir de la sima por su forma de campana.

No es posible decir si antes o después del  episodio de los perros, fue arrojada a la sima una granada de mano, que no llegó a estallar. 



Testimonio 2. Aportado por su nieto Balbino García de Albizu (Donostia)


 

Balbino García de Albizu Usarbarrena (Eulate, 1877-Urbasa, 1936)

Balbino García de Albizu Usarbarrena, nace el 31/03/1877, en Eulate. Es hijo de Pedro García de Albizu Sáez de Jáuregui (casado en segundas nupcias tras enviudar de su primer matrimonio) y de Dominica Usarbarrena García de Eulate.

En 1893 firma, pese a no tener la edad requerida, en la protesta que suscriben más de 100.000 navarros contra las intenciones del ministro Gamazo de suprimir la foralidad fiscal. Las firmas se recogen en una publicación que se edita con el título de “Libro de Honor de los Navarros”.

Contrae matrimonio canónico con Elena Arana Pérez de Eulate, hija de Pascual Arana Baquedano, natural de Ecala, y de Segunda Pérez de Eulate Ruiz de Galarreta, ya fallecida, el 28/10/1902, en la iglesia parroquial de Eulate. Tendrán 8 hijos de su matrimonio. Se casa pobre y morirá pobre. La vivienda y tres pequeñas piezas de labor son aportadas al matrimonio por su mujer Elena.

En 1909 se menciona su profesión como carbonero.

En 1915 es nombrado guarda jurado del Monte Limitaciones de las Améscoas, el día 15 de marzo. Toma posesión de ese cargo en abril.

En 1931 colabora con Gregorio García Larrambebere, candidato en las elecciones municipales y único concejal de izquierdas que resulta elegido en Eulate. El citado Gregorio, viudo y sin hijos, es amigo de Balbino, en cuya casa come y cena.

En estas citadas elecciones y las de diferente nivel que se celebran en Eulate, gana por mayoría absoluta la coalición de partidos de derechas, por lo que nada se altera en el pueblo, ni en el valle, por la proclamación de la República.

En 1932 encabeza, junto con Félix Goya Urbieta, una protesta, respaldada por un número elevado de vecinos y dirigida al ayuntamiento local, contra la construcción de un frontón cubierto en el pueblo, para que, con el importe consignado, se atiendan otras necesidades sociales de mayor prioridad. La propuesta no prospera.

En las elecciones generales para diputados de 1933, representa como interventor, en el ayuntamiento de Eulate, al candidato socialista Ricardo Zabalza.

En 1934 es tesorero de la agrupación de la UGT en Eulate.

El 17-18 de julio de 1936 se produce el levantamiento militar en España.

El mismo 18 de julio, es destituido de manera fulminante de su puesto de guarda del Monte Limitaciones.

De 19 de julio, data la Instrucción Reservada del general Mola, que dice: “Hay que sembrar el terror … hay que dejar la sensación de dominio, eliminando sin escrúpulos ni vacilación a todos los que no piensen como nosotros”.

 De ese mismo día y en versión light de lo dicho por Mola, llega al ayuntamiento de Eulate, una instrucción telefónica, que el secretario local redacta como sigue:

En el pueblo de Eulate, a 19/07/1936, siendo las 15 H, comparecieron en el salón de sesiones de este ayuntamiento, las fuerzas adictas al movimiento nacional, presentando una orden telefónica que literalmente dice así:

 El Sr. Coronel Primer Jefe de la comandancia, telefónicamente ordena: Toda la fuerza a mis órdenes facilitarán a los elementos derechistas facilidades para el desempeño de sus funciones y procurarán vigilar andanzas y movimientos de los elementos izquierdistas, a los que, sin contemplaciones de ningún género, se les hará entrar en el más exacto cumplimiento de la Ley, toda vez que los otros partidos nunca se han salido, salen, ni saldrán de la misma, y si por casualidad alguno de ellos se extralimitase, se les apercibirá al exacto cumplimiento de la misma, no consintiéndoles ninguna extralimitación. El Sargento José Hernández. Rubricado.

 Y reunido el ayuntamiento que cesa, en virtud de la orden anterior, se procede a nombrar una comisión gestora integrada por …

 En tal estado y siendo las 15 H y 15’, se levanta esta acta que firman los concejales salientes que se hallan en el salón y los señores que entran a formar parte de la Comisión gestora, de todo lo que yo, el Secretario, certifico.

 Este documento evidencia que los miembros electos del ayuntamiento de Eulate, no alcanzan el perfil que Mola pretende imponer y son destituidos de sus cargos por una orden verbal transmitida telefónicamente por un sargento. La reunión dura 15 minutos, lo que deja bien claro el carácter sumarísimo de la destitución.

En 1936, durante el mes de agosto, mi abuelo es subido en varias ocasiones a Urbasa, junto con Félix Goya Urbieta y Gregorio García Larrambebere, en macabros simulacros de fusilamiento que, tras la “función”, no se consuman.

El 7 de septiembre de 1936, es llevado de noche a Urbasa, y muerto a tiros, fusilado, sin juicio previo, junto a Gregorio García Larrambebere, natural de Muneta y vecino de Eulate, y Balbino Bados García, natural de San Martín de Améscoa, que ejerce como maestro en Peralta, todos ellos afiliados a UGT. Los cuerpos son arrojados a una sima, conocida y localizada. Sus defunciones no se inscriben ni en Registro Civil, ni en el libro parroquial de difuntos.

Previamente, mi abuelo es confesado por el arcipreste de Eulate, de 32 años de edad, que el 19 de julio se había alistado voluntario como capellán castrense en el Tercio de Lácar. Antes de dos meses, retorna a su función parroquial, que ejerce en Eulate y Aranarache, aunque “olvide” registrar la defunción de los dos vecinos del pueblo fusilados.

En marzo de 1938, pese a llevar año y medio fallecido, se le instruye a Balbino expediente por su “oposición al Movimiento Nacional” y se le conmina para que, en el término de ocho días, comparezca en Estella ante el Juzgado de Incautación de Bienes.

Al no presentarse, por razones obvias, es declarado en situación de embargo de sus bienes: vivienda y tres pequeñas piezas de cultivo. Su viuda reclama de inmediato, alegando que los bienes citados los había aportado ella al matrimonio. No obtiene respuesta.

El 14/10/1938, el general jefe de la 6ª Región Militar condena a mi abuelo (lleva ya dos años fallecido) a pagar 5.000 pesetas de multa.

Nuevo recurso de mi abuela y, finalmente, pese a atribuírsele a Balbino “significación extremista y gran influencia en el establecimiento de la Casa del Pueblo en Eulate”, se admite que la totalidad de los bienes embargados eran propiedad de su esposa y se reduce la sanción a 100 pesetas. El 3/06/1941, se documenta el pago de la multa y se permite al “encartado” (que lleva casi cinco años difunto) “que recupere la libre disposición de bienes”.

En 1979, 43 años después de su fallecimiento, por fin, se consigue inscribir en el Registro Civil su defunción. La Certificación en Extracto de Inscripción de Defunción dice escuetamente que “falleció en las inmediaciones del Km 24 de la carretera Estella-Olazagutia”. Como si fuera un accidente de automóvil.

Lápida en memoria de Balbino García de Albuzu, Gregorio García y Balbino Bados

La certificación literal dice lo mismo, aunque precisa que “Se efectúa la inscripción de conformidad con auto del Juzgado de Distrito de Estella, de fecha 24 de febrero pasado y aprobado por auto dictado por el Juzgado de primera instancia por el suyo propio en 28 de febrero pasado, declarado firme. Expediente nº 5/79”.

En noviembre de 2011 los restos de los fusilados en esta sima siguen allí.



Testimonio 2. Julia Otxoa, nieta.


Balbino García de Albizu - EulateInformación sobre mi abuelo Balbino Garcia de Albizu Usarbarrena:

59 años, nacido en Eulate (Navarra). De profesión guarda forestal del Monte Limitaciones durante el período de 1915 a 1936, año en el que es cesado como guarda forestal por su ideario de izquierdas.

Casado con Elena Arana tuvo ocho hijos. El 5 de septiembre de 1936 fue sacado de su casa en Eulate y tras pasar una noche en el cuartel de la Guardia Civil en Eulate, fue puesto en libertad. La noche del 7 de septiembre fue sacado de nuevo de su casa , esta vez  para ser asesinado en la  Sierra de Urbasa , su cuerpo fue arrojado a una sima donde los pastores arrojaban el ganado muerto.

Cabe pensar que el párroco de Eulate en aquellas fechas Jesús Ordoñez , podría haber apelado  como cristiano, a la obediencia debida al quinto mandamiento, pero no fue así,  aunque acompañó a las futuras víctimas y a sus verdugos  con la intención de confesar a los que iban a ser  ser fusilados :  Balbino Garcia de Albizu , Balbino Bados y Gregorio García.

 

 

 


Aspecto de lápida de homenaje.

 


Notas de Parquedelamemoria.org


* LA SIMA DONDE FUE ARROJADO NO ES LA DE OTSOPORTILLO, POR VOLUNTAD DE LA FAMILIA NO SE FACILITAN LAS COORDENADAS DE MODO PÚBLICO.

Agradecimiento de Parquedelamemoria.org por el testimonio directo, complementario y desinteresado de los familiares de Balbino García de Albizu Usarbarrena.