26/03/2010 Natalia Junquera. EL PAÍS. «Francisco Correa y Falange. El acusado denuncia al investigador. Quien va a sentar a Garzón en el banquillo por investigar los crímenes del franquismo mató al 98% de las víctimas que hemos exhumado», asegura Emilio Silva, presidente de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH). «Todo esto es muy triste. Hay familiares deprimidos por lo que le están haciendo a Garzón». Otros, recuerda, han muerto esperando.
La asociación acusa de prevaricación a todos los jueces de primera instancia que, al ser alertados del hallazgo de restos humanos con signos de violencia (impactos de bala, huesos rotos…), no han visitado la fosa, «incumpliendo la Ley de Enjuiciamiento Criminal» y entregará al Consejo General del Poder Judicial un informe con sus nombres. Daños colaterales «Desde que se admitió a trámite la querella contra Garzón, presentamos 10 denuncias por hallazgos de restos humanos en distintas localidades. En siete ni nos contestaron. Los jueces territoriales ven lo que le han hecho a Garzón y no quieren líos. Pasará lo mismo con el PP. A ver qué juez se atreve a investigarles después de esto», dice Silva. Los familiares están deshechos y las organizaciones de derechos humanos de todo el mundo, perplejas. «Es curioso, la indignación es mayor fuera que dentro de España», añade el presidente de la ARMH. La Asociación declaró ayer que el día que Garzón sea juzgado por abrir una causa contra el franquismo, su banquillo estará lleno de gente. «Nos sentaremos con él miles de hombres y mujeres que llevan décadas esperando justicia». Están decididos a seguir luchando. «Llegaremos a Estrasburgo».
Fuente original de la noticia: EL PAÍS